SUEÑOS DE NFL
“En un mundo tan singular, que el vivir solo es soñar; y la experiencia me enseña que el hombre que vive, sueña lo que es, hasta despertar.” Esta frase de Pedro Calderón de la Barca en su obra de teatro La Vida es sueño, nos engloba lo que termina siendo la vida. Un conjunto de sueños que unos se cumplen y otros, no. Pero, sin duda, hay que trabajar para poder cumplirlos. Para poder realizarlos. Para poder concretarlos.
Los jugadores en College sueñan con poder llegar a jugar en la NFL. Los jugadores NFL sueñan con ser exitosos y ganar Super Bowls. Después si lo hacen sueñan, una vez retirados, poder ser nominados y votados para pertenecer al Salón de la Fama.
La vida es un sueño, un conjunto de sueños, que hay que luchar, temporada tras temporada, día a día, yarda a yarda y pulgada tras pulgada, para conseguirlos.
Cada temporada, hay más de 10,000 chicos (y esto solo en la división más importante) que juegan, entrenan, luchan y sueñan todos los días para poder hacer algo en sus vidas. La inmensa mayoría de ellos, no tendrán nunca una posibilidad de ser reclutados por un equipo NFL. Pero aún así, luchan todos los días por ello, aunque sea para mantener sus becas y poder acceder a una carrera universitaria.
Es por ello que el College Football tiene tantas emociones a su alrededor, los chicos juegan por pasión al deporte, por amor a su camiseta, por entregarse a sus colores, por compromiso con ellos mismos y por conseguir sus sueños, aunque estos estén alejados de la NFL. Esto genera una atmósfera de romanticismo que atrapa, que apasiona y que mantiene a millones de espectadores repartidos por el mundo atentos al desarrollo de la temporada de College Football.
Y es que es de todos sabido que la NFL dista mucho de la NCAA. No solo por lo que antes menciono, sino porque en la NFL están los (a partir del nuevo NFL-CBA) 1760 mejores jugadores en activo del football de los Estados Unidos. Una lucha que también se da todos los días, pero en un contexto totalmente diferente. Una lucha férrea, que para el jugador universitario -si lo logra- será un cambio único en la vida. Un momento en el que se tendrá que adaptar a la liga, al sistema nuevo y al equipo o morir en el intento.
Pero, aun así, el sueño al jugador universitario no se lo puede quitar nadie. Y eso se puede leer perfectamente en las caras de los jugadores cuando son seleccionados en el draft. Cuando su nombre es mencionado por el comisionado y ahí empieza su nuevo sueño, ese que será aun más duro, pero que deben vivir. Porque el hombre que está vivo, sueña lo que es y también lo que será.
Como Calderón de la Barca dijo este sueño es y existe hasta despertar. Estos miles de chicos universitarios sueñan, cada uno con sus diferencias. Sus particularidades. Todos, seguramente, soñando en grande, quizás algo imposible. Pero nadie, absolutamente nadie les puede o debe limitar sus sueños. Porque los sueños se trabajan y construyen por pulgadas, yardas, días, meses y temporadas completas. La vida es sueño, sí. Y al despertar de ese sueño está en nosotros y en cada uno de los chicos que están en esta guía uno de dos caminos: El primero, no haberlo logrado, pero tener la satisfacción de al menos intentarlo para continuar soñando. El segundo, para menos, si haberlo logrado y seguir así construyendo aún más sueños
Así que, estimado lector, no te puedes perder esta guía de jugadores universitarios plagados de sueños. Lo que tienes en tus manos no lo has visto nunca. Si eres un apasionado del College estás en el lugar indicado, si apenas te adentras a este increíble mundo, la mejor forma es a través de esta guía. La mejor forma de ver el Football Universitario, de la forma más Cool.
@imaisterrena