Un ancestral proverbio chino afirmaba que “cuando los hermanos trabajan juntos, las montañas se convierten en oro”. Sin duda, esa será nuestra intención con esta sección: el firme deseo de que College Football y NFL se den la mano, unan sus maravillosas sendas y que el público -más mayoritario del football profesional- otorgue una pequeña oportunidad a una competición que nos embarga, nos sublima y nos hace amar cada centímetro de los vetustos estadios y emparrillados de las más dispares e ignotas conferencias.
#VivirNFLSentirCollege
CHAMPIONSHIP PAC-12
OREGON DUCKS AT #13 USC TROJANS
#GoDucks 
Vs. #FightOn 
19/12/20
02:00 / 
FOX
LOS ÁNGELES MEMORIAL COLISEUM, LOS ÁNGELES (CALIFORNIA)
JULIÁN GUEDE, @JULIANGUEDE
La Pac-12 termina la temporada de la misma manera que la comenzó, dando vergüenza. Se estableció como la conferencia que parecía tener más claro que no iba a jugar, y todos alabamos su postura férrea y coherente ante la pandemia. Al final confeccionaron un calendario muy breve, que se quedó aún más ridículo debido a los múltiples positivos en diferentes programas, hasta el punto de que el campeonato de conferencia no enfrentará a los mejores de cada división, puesto que los Washington Huskies no contaban con los jugadores exigidos para disputar el partido.
Y entonces nos encontramos con la final de conferencia que todos soñábamos en verano, los equipos que más llaman la atención en la conferencia. En el mítico estadio -que fue escenario de los cuatro oros de Carl Lewis en los Juegos Olímpicos de 1984- se enfrentan la mejor offensive line y el mejor juego de carrera de la conferencia contra el ataque aéreo más bonito y espectacular del lejano oeste.
Los Trojans y los Ducks nunca se han enfrentado en un Championship. Tenían que haberse medido sus fuerzas en el primer campeonato de conferencia en 2011, pero los Trojans habían sido sancionados y Oregon tuvo que ganar el Championship contra UCLA.
En este complicado 2020 vamos a DISFRUTAR de un partido divertidísimo y muy competido al que USC llega con una media de 35’2 puntos y Oregon 34’2.
USC
Los Trojans llegan a esta final de conferencia con un récord de 5-0 merecido, pero que deberíamos cogerlo por pinzas, puesto que tres de esos partidos fueron victorias ajustadas tras remontadas y que se las deben, en gran medida, al pundonor y al carácter ganador de Kedon Slovis. Los partidos contra Arizona, Arizona State y UCLA las sufrieron bastante, aunque pueda parecer que contra los Bruins fue bastante clara, fueron todo el partido por detrás, haciendo la goma como suele decirse en el argot ciclista. Y realmente no se pusieron por delante del marcador hasta la mitad del último cuarto. Y las victorias contra las Arizonas fueron impulsadas por un enorme Slovis, que se echó el equipo a la espalda tras unas desconexiones generales de todo el equipo. Con respecto a los otros dos partidos contra Utah y Washington State, fueron victorias contra un equipo que se estrenaba en la temporada tras dos semanas parados por unos brotes de COVID que los dejaron inactivos, y contra un equipo que está en proceso de transición, tras el cambio del Head Coach y con un quarterback freshman.
En ningún momento quiero infravalorar el récord de los de la Universidad del Sur de California puesto que son un ataque total, muy divertidos de ver y con un mariscal absolutamente fascinante. Las claves ofensivas de los Trojans son: Kedon Slovis, Amon´Ra St. Brown, Drake London y Tyler Vaughs. Viendo los fríos números, podríamos pensar que el running back Vavae Malepai puede ser importante porque tiene unos números llamativos, pero USC juega un esquema Air Raid muy estricto, el juego de carrera es bastante irrelevante y Malepai es muy irregular, aunque es un pedazo de running back.
Kedon Slovis es un enorme QB con un brazo buenísimo, una precisión magnífica, es capaz de hacer tres lecturas antes de lanzar y con una calma en el pocket, que sorprende en un sophomore. Cierto es que tiene demasiada tendencia a salir corriendo, si no lo ve claro, y eso le acaba restando bastante. Lo más positivo es el pundonor en los momentos clutch, con los que ha conseguido ganar los partidos contra los Sun Devils y frente a los Wildcats y que fue clave para la remontada contra los Bruins.
Amon´Ra, London y Vaughs son la mejor arma para Slovis por su versatilidad y su capacidad para hacer la friolera de 1200 yardas combinadas entre los tres. Cada uno es especial aunque el más llamativo es St. Brown por su espectacularidad.
El gran problema de los Trojans es la nefasta calidad de su defensa, principalmente contra la carrera. Y precisamente se enfrentan al mejor equipo de la conferencia corriendo. Otro problema, aunque un poco menor, es el sistema Air Raid, ya que les hace muy predecibles. En ese momento es donde entrar los tres principales receptores y todos los secundarios puesto que ofrecen múltiples alternativas a Slovis.
OREGON
Los Ducks aspiraban a playoffs y así habían confeccionado su calendario original. Con los cambios, les obligaba a ganar todos los partidos por paliza. Los vecinos de estado les rompieron toda posibilidad de optar a los playoffs y se desmoronaron totalmente. El equipo dirigido por Mario Cristóbal se desconectó totalmente del siguiente partido contra California, porque ya no contaban con llegar ni a la final de conferencia. Esta derrota fue absurda porque los Golden Bears tienen una defensa lamentable contra la carrera y los Ducks no quisieron aprovecharlo.
Ahora los de la capital del estado de Lewis y Clark se encuentran con un récord de 3-2 y con un regalo caído del comisionado de la Pac-12, que en todo momento quería este enfrentamiento.
Las claves de Oregon radican en una offensive line potentísima, que casi no ha notado el opt out de Penei Sewell, un juego mayoritariamente de carrera centrado en Verdell y Travis Dye y una defensa durísima en el front seven, aunque un poco floja en la secundaria.
Una buena línea siempre favorece un juego de carrera seguro. Eso es algo que todos tenemos claro y Mario Cristóbal se apoya totalmente en su coordinador y reclutador de OL para arrasar por tierra hasta tal punto que las yardas de carrera son casi el doble que las de pase. CJ Verdell es el líder absoluto de ese backfield y absorbe la mayoría de los snaps de carrera, aunque este año ha despertado como un gran receptor. Pero CJ no está solo, tiene a Travis Dye (hermano del LB Troy Dye), que cuenta con menos acarreos, pero es mucho más efectivo y aprovecha mejor sus carreras.
Con este esquema de juego, el quarterback está mucho más liberado y con menos presión y ahí tenemos una clave que todos los fans de Oregon estábamos esperando desde que terminó la temporada pasada. Tyler Shough, necesita mejorar mucho, debe mostrarse más calmado en el pocket y hacer más lecturas. Tiende a salir corriendo cuando la primera lectura le falla y eso es algo que debería mejorar. Contra el front seven de USC no debería tener demasiado problema, pero si esta final de conferencia hubiese sido contra Utah, “otro pato les cantaría”.
En el grupo de receptores hay que estar muy atentos a los dos Johnson y a Mycah Pittman, el hermano del ahora receptor de los Indianapolis Colts. La pinta de Mycah era mucho mejor que la de Michael y se está destapando como un receptor espectacular y está aprovechando muy bien las opciones que Cristóbal y Shough le dan. Johnson & Johnson wide receiver y tight end son las primeras opciones del QB de Oregon y están aportando una barbaridad en el juego aéreo, sobre todo DJ (el TE) en la redzone.
La defensa es de otro planeta. Las miradas estaban puestas en Kayvon Thibodeaux porque fue el mejor jugador de su clase y porque es o debería ser el mejor o uno de los mejores defensas de toda la NCAA. A Kayvon puedes ponerlo de defensive tackle, defensive end, inside linebacker, outside linebacker…que va a presionar al QB, va a llegar al corredor o a bloquear al receptor. La visión del juego que tiene Thibodeaux es impresionante.
Y a su lado le han puesto al hermanísimo de Penei Sewell. Noah Sewell venía con grandes galones como un grandísimo LB y junto con Justin Flowe apuntaban a ser los LB titulares de la próxima temporada. Pero el “pequeño” de los Sewell no quiso esperar y esta temporada ha querido aprender de Thibodeaux y parece que es muy buen alumno.
Resumiendo. La madrugada del viernes tenemos un partidazo que no te puedes perder con dos equipos de pedigrí, dos estilos opuestos en ataque, dos formas muy diferentes de comprender la defensa y dos estados que se enfrentan por el trono de la conferencia pacífica. USC Vs. Oregon, Trojans Vs, Ducks, el estado del postureo Vs. el estado más bonito del la costa oeste. Solamente uno podrá llevarse el título de la Pac-12.
Y no te olvides. Es un partidazo, no te lo puedes perder.
CHAMPIONSHIP MAC
BALL STATE CARDINALS VS. BUFFALO BULLS
#WeFly 
Vs. #UBhornsUP 
19/12/20
01:30 / ESPN
FORD FIELD, DETROIT (MICHIGAN)
Ball State y Buffalo Bulls se enfrentarán la madrugada del próximo viernes, en el Ford Field de Detroit, para dirimir el campeón de una súper atractiva Mid-American Conference. Ambos equipos vienen en una racha de juego y resultados. Ball State, tras perder el primer partido de la temporada ante Miami (Ohio), ha ganado cinco partidos de manera consecutiva. Por su parte, Buffalo ha asolado -con mano de hierro- la East Division, con cinco victorias y una cifra desorbitada en su anotación total, la friolera de 259 puntos totales.
El partido ha perdido algo de magia, pues la estrella cardinal, el corredor Caleb Huntley, ha decidido hacer opt out el resto de temporada y centrarse en la preparación del próximo NFL Draft. Ese duelo Patterson frente a Huntley hubiera sido épico. Por tanto, se evidencia un claro favoritismo hacia las huestes de Lance Leipold. No obstante, los Cardinals han logrado los dos últimos decisivos triunfos -Central Michigan y Western Michigan- sin su estrella y basando su juego en la conexión Plitt-Hall. ¿Será capaz Ball State de romper el invicto de los Bulls, dar la sorpresa y triunfar en la MAC? En esta loca conferencia todo es posible…
BALL STATE
Ball State -y sus sufridos aficionados- lograron sobrevivir al final más loco de un partido de football de los últimos años. Los Cardinals consiguieron remontar una desventaja de 14 puntos, poniéndose por delante gracias a un field goal en las postrimerías del encuentro. Sin embargo, en la jugada final, Western Michigan completó, de manera épica y heroica, numerosos pases laterales ante la mirada atónita de jugadores y fanáticos cardinals, que habían invadido el emparrillado del Scheumann Stadium para celebrar el campeonato de división.
Los Broncos lograron anotar ante la incredulidad de público y jugadores. El touchdown subió al marcador, la jugada se revisó y, cuando el colegiado iba a dar su veredicto, la transmisión de ESPN presentó problemas técnicos. Finalmente, la anotación quedó anulada por un pase lateral adelantado y las mesnadas de Mike Neu pudieron celebrar tan importante gesta.
Uno de los grandes protagonistas del partido fue el quarterback Drew Plitt, que completó 22 de 33 pases para 249 yardas y tres touchdowns. Aunque, sin duda, el héroe del encuentro fue el wide receiver senior Justin Hall, que disputó el mejor partido de su carrera, deslumbrando a propios y extraños con 175 yardas y dos touchdowns.
De acuerdo a una información de ESPN, Caleb Huntley ha decidido borrarse del resto de la temporada cardinal para centrarse en su participación en el NFL Draft. Huntley es responsable de 437 yardas y seis anotaciones en sus tres partidos del año, consiguiendo una racha de siete partidos consecutivos con más de 100 yardas de carrera. Su ausencia en el partido del próximo viernes condicionará enormemente el esquema ofensivo de Mike Neu. Con la ausencia de Huntley, el RB Tye Evans (250 yardas, 1 anotación) asumirá el mando de las operaciones terrestres.
Los Cardinals promedian 33’7 puntos y casi 460 yardas por encuentro. El QB senior Drew Plitt será el motor del ataque. Completa el 66’3% de los pases que intenta, alcanzando 1674 yardas, 13 touchdowns y solo sufriendo 5 interceptaciones. Por aire, Plitt tiene un socio con mayúsculas, el receptor senior Justin Hall, cuyo final de temporada está siendo sensacional (620 yardas, 3 TDs). Además, aporta por tierra, pues ya acumula 176 yardas y una solitaria anotación. Junto a Hall, también contribuirán los receptores Yo’Heinz Tyler (413 yardas, 6 TDs) y Antwan Davis (344 yardas, 1 TD).
Ball State se verá las caras con el rival más duro de la temporada. Unos Bulls que son temibles a ambos lados del ovoide. En defensa, el programa de Muncie concede 27’5 puntos y 432’2 yardas por encuentro. La defensa tendrá que parar el poderío terrestre de la estrella de Buffalo, Jaret Patterson y sus compañeros de backfield, que lideran el ataque por tierra de la nación. Y, precisamente, en el juego terrestre es donde más flaquea la zaga cardinal, recibiendo la friolera de 147’8 yardas por partido.
En esa defensa de Ball State sobresalen dos figuras por encima de todo: los linebackers Brandon Martin (72 tackles, 1 sack, 1 pase defendido) y Jaylin Thomas (66 placajes, 1 sack). Además, en una unidad muy compacta, hemos de citar a los safeties Brett Anderson II (41 tackles, 1 pase defendido, 1 interceptación) y Bryce Cosby (44 placajes, 1 sack, 3 pases defendidos, 1 interceptación, 1 fumble).
BUFFALO
Los Bulls llegarán al Championship en pleno apogeo, tras apalizar 56-7 a Akron en el último partido de la temporada regular. El juego de carrera de Buffalo volvió a ser devastador, acumulando 428 yardas totales. Kevin Marks Jr. corrió para 182 yardas y 2 anotaciones, mientras que el mediático Jaret Patterson sumó 105 yardas y 2 touchdowns más. Sin duda, la clave del partido contra Ball State residirá en el funcionamiento o no del backfield del conjunto entrenado por Lance Leipold.
La temporada de Jaret Patterson está siendo simplemente espectacular. Acumula 1025 yardas y 18 anotaciones en tan solo 5 encuentros, promediando la escalofriante cifra de 8’3 yardas por acarreo. Patterson cabalga con fuerza hacia el NFL Draft. Su compañero, Kevin Marks Jr., lo secunda con 510 yardas y 5 TDs. Buffalo es el equipo que mejor corre en la nación, con una media de 344’2 yardas por partido. El sistema ofensivo funciona a la perfección -con esta primacía del juego terrestre- y promedia 51’8 puntos y 510’6 yardas por encuentro. Cifras sencillamente estratosféricas.
Además, los Bulls son uno de los mejores programas de la nación en solvencia en la red zone, anotando el 95’2% de las veces que visitan esta zona de peligro. En 21 viajes, Buffalo ha conseguido 20 TDs (18 de carrera y 2 de pase). Mareante… Kyle Vantrease se está erigiendo en un buen gestor del juego, completando el 60% de los pases que intenta y llegando a 821 yardas, 6 anotaciones y una interceptación. Además, ha conseguido 2 TDs de carrera. El ataque por aire no es muy utilizado -lógicamente-, siendo sus piezas más interesantes el trío de receptores formado por Antonio Nunn (353 yardas, 2 TDs), Trevor Wilson (191 yardas, 2 TDs) y Jovany Ruiz (102 yardas, 1 TD), así como el tight end Zack Lefebvre (109 yardas, 1 TD).
La defensa de Buffalo también está siendo muy dominante, permitiendo apenas 21 puntos y 367’2 yardas totales por encuentro. En el partido frente a los Zips, solo concedió 204 yardas y 3 de 15 terceros downs. La especialidad de la zaga preparada por Brian Borland es la defensa contra el pase, limitando a sus oponentes a unas escasas 207 yardas por encuentro. Con la baja de Huntley, Ball State se verá forzada a pasar y ahí, precisamente, radica una de las grandes virtudes de los Bulls.
El indiscutible líder de la zaga es el mellizo de Jaret, James Patterson, un prometedor linebacker, que ya ha conseguido 43 tackles (20 solo), 1 pase defendido y 1 fumble forzado. La otra gran estrella de esta competente unidad es el maravilloso rusher Malcolm Koonce, que es una máquina de meter presión al QB rival y acumula 4 sacks, 20 placajes y 2 pases defendidos. Otros nombres que debemos tener muy en cuenta son el safety Cory Gross Jr., el linebacker Tyree Thompson o el tackle George Wolo.
VS. #WeAreMarshall 
TODO COLLEGE FOOTBALL, @
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