Este fin de semana es muy especial y, desde @CoollegeFB y @TheSpanishBowl , trataremos de analizar y dar nuestro punto de vista de todas las finales de conferencia que van a hacernos vibrar y emocionarnos. Lee y disfruta de “Los Championships de Coollege”.
Un ancestral proverbio chino afirmaba que “cuando los hermanos trabajan juntos, las montañas se convierten en oro”. Sin duda, esa será nuestra intención con esta sección: el firme deseo de que College Football y NFL se den la mano, unan sus maravillosas sendas y que el público -más mayoritario del football profesional- otorgue una pequeña oportunidad a una competición que nos embarga, nos sublima y nos hace amar cada centímetro de los vetustos estadios y emparrillados de las más dispares e ignotas conferencias.
#VivirNFLSentirCollege
CHAMPIONSHIP SEC
#1 ALABAMA CRIMSON TIDE VS. #7 FLORIDA GATORS
#RollTide Vs. #GoGators
20/12/20
02:00 / CBS
MERCEDES-BENZ STADIUM, ATLANTA (GEORGIA)
Tras diluirse sus esperanzas de Playoffs con la inesperada derrota ante LSU, Florida tiene ante sí la oportunidad de redimirse en el espectacular Championship de la Southeastern Conference que le enfrentará a unos muy favoritos Crimson Tide. La vida siempre te da una nueva opción y las mesnadas de Dan Mullen pueden acometer un increíble upset que haga temblar los cimientos del College Football.
La empresa se antoja harto compleja, pues Alabama llega en el mejor momento de la temporada, con un Mac Jones en estado de gracia y que se presenta como el más firme candidato al Heisman, con un Devonta Smith que está omnipresente en todas las facetas del juego, con un Najee Harris con un poderío y una solvencia enorme en el emparrillado y con una defensa que llega plena de forma al envite. ¿Podrá Dan Mullen ganarle la partida a Nick Saban? Todo parece indicar que no, pero nunca subestimes la capacidad depredadora de un caimán, por más inmóvil que parezca.
ALABAMA
Estos Crimson Tide dan pánico. Exhibición tras exhibición, las hordas aleccionadas por Nick Saban han arrasado -como la montura del indómito rey Atila- todos los emparrillados que han pisado. Su última víctima: Arkansas. La próxima: ¿Florida? La sensación de superioridad de Alabama ha sido tan arrolladora esta temporada que, incluso con una derrota el sábado, la Marea Carmesí tiene asegurado un puesto en la pelea por el título nacional.
El quarterback Mac Jones ha rozado la perfección esta temporada: 3321 yardas de pase, 76’4% de pases completados (217 de 284), 27 TDs y solo 3 interceptaciones. Jones no debería tener problemas para maltratar a una mediocre defensa contra el pase de Florida, que ha permitido 20 touchdowns por aire esta temporada. La secundaria gator está presentando muchos problemas y la conexión de Jones con Devonta Smith asegura yardas de martirio para la fanaticada de Gainesville. Ahora bien, Mac Jones necesitará la mejor versión de su línea ofensiva, pues el defensive front de Florida está sembrando el pánico entre los mariscales de campo rivales. Miller, Cox y compañía lideran la SEC con 31 sacks. Quizá esta sea la clave para que los Gators puedan llevarse la victoria.
Pero este ataque de Alabama es -quizá- el mejor de la últimas décadas. Tener a dos jugadores, como Devonta Smith y Najee Harris, en un estado de gracia tan exultante maximiza las posibilidades de los pupilos de Nick Saban. La campaña de Devonta Smith es simplemente exorbitante, con 1327 yardas y 15 TDs. Su compañera de diabluras por aires es John Metchie III, que ha hecho olvidar, en cierta medida, a ese nuevo hijo del viento llamado Jaylen Waddle. El receptor sophomore ha logrado 720 yardas y 6 TDs y, junto a Devonta, forma un dúo de wide receivers de auténtico ensueño. ¿Será capaz Devonta de dar la sorpresa y llevarse el Heisman Trophy?
Najee Harris es un auténtico bulldozer en el backfield, con una capacidad atlética, técnica y física que lo convierte -de largo- en el mejor corredor de la futura promoción del NFL Draft ’21. 1084 yardas de carrera, 22 anotaciones y una media de casi 6 yardas por acarreo son números de auténtico extraterrestre.
El defensive front de Florida es el mejor de la SEC, pero el segundo mejor de la conferencia es el de Alabama. 27 sacks rubrican este puesto de privilegio y esa lucha de trincheras -defensiva frente ofensiva- se antoja épica. Aunque el ataque de Florida luce impresionante en shootout, los edges de la Marea Carmesí pueden meter mucha presión y hacer que Trask tenga una noche para olvidar. La secundaria y los linebackers tienen que dar su mejor versión para tratar de minimizar el peligro de los pases de Trask en los tres niveles del campo. Pitts, Copeland, Toney y Grimes pueden ser un auténtico dolor de cabeza para la zaga carmesí. En este sentido, la secundaria formada por el increíble freshman Malachi Moore (41 tackles, 6 pases defendidos, 3 interceptaciones, 1 FF, 1 FR, 1 FTD), Jordan Battle, Daniel Wright, DeMarcco Hellams y Patrick Surtain II tienen mucho que decir en el encuentro. El defensive line sophomore Christian Barmore se ha erigido, con sus 6 sacks, en una auténtica máquina de presión para los QBs rivales. Por último, debemos destacar a esa excelsa pareja de linebackers, Christian Harris -seria duda para el partido- (65 tackles, 2’5 capturas, 2 pases defendidos) y Dylan Moses (62 placajes, 1’5 sacks, 2 pases defendidos, 1 interceptación).
FLORIDA
La esperanza de clasificación de Florida para el College Football Playoff se fue con la bota que lanzó Marco Wilson, en una decisión absurda del defensive back gator. A pesar de la tensión del momento, la acción fue completamentamente injustificable. Wilson arrojó 20 yardas el zapato del tight end Kole Taylor, tras celebrar una parada en el tercer down de un partido que se le complicaba a las huestes de Dan Mullen. Esta penalización supuso 15 yardas para los Tigers, mantener el drive vivo y anotar, posteriormente, un field goal de 57 yardas, cuando restaban 23 segundos. El postrero intento de empatar el partido con un lanzamiento de Evan McPherson resultaba infructuoso y Florida perdía sus escasas posibilidades de entrar en Playoffs.
El partido ante LSU cerró la temporada regular de la peor manera imposible. Fue un encuentro para olvidar, en el que Kyle Trask sufrió incluso 2 interceptaciones. ¿Es esta la mejor manera de llegar al partido contra Alabama? Lógicamente, no. Pero Mullen y los suyos deben enfocarse en la impresionante final que tienen por delante, olvidarse del pasado y diseñar una estrategia para derrotar al Crimson Tide. Mullen tiene que aprovechar al máximo la capacidad de Trask bajo el center y dañar a la secundaria de Alabama. A pesar del excelso rendimiento de esta línea, los backs crimson tide no han enfrentado a un quarterback tan bueno como Kyle en toda la temporada. Trask ha cuajado una campaña sensacional, con un 70’2% de pases completados (259 de 369 intentos), 40 touchdowns (récord en la SEC) y solo ha sufrido 5 interceptaciones -2 ante LSU-.
Su conexión con Kyle Pitts es mortal, el #Kyle2Kyle es el hashtag más de moda en Gainesville. Pitts (641 yardas, 11 TDs) es una auténtica pesadilla para las defensas rivales, un tormento que puede desequilibrar, por sí solo, un partido. Mullen lo sabía y reservo a Pitts frente a LSU. Trask tiene que asegurar los pases, buscar al máximo a Pitts y tratar de adelantarse a los movimientos de la agresiva defensa de Alabama. Sumar yardas y touchdowns -aunque suena a completa obviedad- debe ser la prioridad de los Gators. Se trata de conseguir un punto más de los que Mac Jones sea capaz de generar.
Será vital la lucha de trincheras ofensivas gators frente al productivo defensive front de Alabama. La línea ofensiva debe ser un auténtico muro que otorgue maniobrabilidad de movimientos y tiempo para pensar a Kyle Trask. No se trata de ganar todas las batallas, hay que ganar la guerra. Es decir, la línea tiene que dar una oportunidad a Trask y a todo el sistema ofensivo para dañar a Alabama.
La importancia de Kadarius Toney en el partido tiene que ser capital. Debe ejercer de auténtico playmaker, ese peligroso jugador capaz de generar yardas y puntos corriendo, recibiendo o retornando. Sus números son impresionantes, 831 yardas, 9 TDs, 146 yardas de carrera y 1 anotación. Trevon Grimes (511 yardas, 8 TDs) y Jacob Copeland (429 yardas, 3 TDs) tienen que aportar su granito de arena por aire. El gran problema del ataque de Florida es el juego por tierra. Ni Dameon Pierce ni Malik Davis ni el freshman Nay’Quan Wright ha logrado asentar un productivo juego de carrera. No obstante, en el amor, en la guerra y… para ganar a Alabama todo cuenta.
La defensa debe tener una misión muy importante: dar un chance a Trask para ganar el partido. En este sentido, quizá el matchup más relevante para Florida sea el duelo del defensive front gator frente a la offensive line crimson tide. Esa trinchera defensiva puede hacer zozobrar a Mac Jones y su guardia pretoriana. Si la zaga gator consigue asentarse y minimizar el peligro de Alabama, Florida puede salir victoriosa del duelo. El linebacker Ventrell Miller se ha erigido en el indiscutible líder de la defensa. Sus 80 placajes (48 solo), 3’5 sacks, 3 pases defendidos y FR lo convierten en uno de los defensas más dominantes de la SEC. Mohamoud Diabate (53 tackles, 1’5 sacks, 1 pase defendido, 1 interceptación, 1 FF) y Brenton Cox Jr. -dudoso para el encuentro- se convierten en la mejor pareja de baile para Miller. Donovan Stiner, Shawn Davis y Kaiir Elam forman una secundaria brillante, mientras que Tedarrell Slaton y Zachary Carter deberán ayudar -a Miller, Diabate y Cox- en la presión a Jones.
CHAMPIONSHIP ACC
#3 CLEMSON TIGERS VS. #2 NOTRE DAME FIGHTING IRISH
#ALLIN Vs. #GoIrish
19/12/20
22:00 / ABC
BANK OF AMERICA STADIUM, CHARLOTTE (CAROLINA DEL NORTE)
El llamado duelo de la venganza tendrá lugar el próximo sábado en el Bank of America de Charlotte. Unos feroces tigres buscan la revancha y la recuperación del honor mancillado. En frente, unos peleones irlandeses que han demostrado mucha solvencia, veteranía y empaque a lo largo de la temporada.
Clemson finalizó el año con un récord de 9-1, siendo la única mancha en su trayectoria la derrota (47-40) infligida por Notre Dame. Los Tigers perdieron, para ese envite, a Trevor Lawrence, aquejado de síntomas de COVID-19. Ahora las huestes de Dabo Swinney vienen con todo y esperan sumar un nuevo título de la Atlantic Coast que asegure un puesto de privilegio en los Playoffs.
Los Fighting Irish llegan invictos al partido, con un contundente récord de 10-0, siendo considerados en el puesto #2 de la nación y con la clara intención de sumar un nuevo triunfo ante los pupilos del pelirrojo de oro.
CLEMSON
Venganza, venganza, venganza… es la palabra que taladra el pensamiento de los jugadores de Clemson desde aquel fatídico 8 de noviembre. Trevor Lawrence está en plena forma y la defensa tiger asusta. Los Tigers llegan a este duelo fratricida -quizás- en el mejor momento de la temporada. El partido es una cuestión de todo o nada para Swinney y sus hombres, pues de perder, tendrían nulas opciones de acceder a Playoffs, aunque conociendo al Comité de expertos… Desde aquella derrota, los Tigers han destrozado y devorado a todas sus víctimas, ofreciendo un auténtico espectáculo de juego y puntos.
El hecho de no contar con Lawrence y jugar con el freshman DJ Uiagalelei no impidió que Clemson supiera hacer mucho daño a la defensa de Notre Dame. Las 439 yardas y 2 pases de touchdown de Uiagalelei así lo demuestran. La causa de la derrota vino, sin duda, del lado defensivo. En su último encuentro ante Virginia Tech, los Tigers destrozaron a las huestes de Justin Fuente por 45-10. No obstante, vimos la peor versión de Lawrence de la temporada, con 12 de 22 pases completados, 195 yardas, 1 TD, 1 interceptación y 2 anotaciones de carrera. La importancia del juego aéreo será capital, ya que los Fighting Irish defienden muy bien la carrera, situándose en el puesto octavo de la nación. La temporada de Lawrence está siendo relativamente buena -aunque no magnífica-, alcanzando 2431 yardas, 20 TDs y solo sufriendo 3 interceptaciones. Añadiendo, además, 121 yardas de carrera y 6 anotaciones.
La otra gran piedra angular del ataque tiger será el corredor Travis Etienne, que tendrá que mejorar las pírricas 28 yardas y 1 TD que cosechó en el pasado enfrentamiento ante Notre Dame. Etienne aúna 758 yardas de carrera y 12 anotaciones, siendo también una efectiva arma por aire con 512 yardas y 2 TDs. Los socios más productivos de Lawrence en el juego aéreo son los receptores Amari Rodgers (845 yardas, 6 TDs) y Cornell Powell (684 yardas, 5 TDs), así como el tight end Braden Galloway (316 yardas, 2 TDs).
Pero donde, sin duda, Clemson puede ganar el partido es con la agresiva defensa de las últimas semanas. Los Tigers llegan al Championship en el puesto séptimo total de la nación (25º contra el pase, 11º contra la carrera y 15º en puntos permitidos). En su pretérito enfrentamiento, Notre Dame martirizó a esta defensa con 518 yardas totales, aunque los Tigers perdieron a algunos de sus hombres defensivos más importantes para aquel encuentro. Minimizar la movilidad de Ian Book y neutralizar el juego de carrera irish se antojan las claves para un triunfo de los de Dabo Swinney. La unidad de linebackers estará dominada por Baylon Spector (56 tackles, 3’5 sacks, 1 pase defendido, 1 FF, 1 FR), Jake Venables (30 placajes, 2’5 sacks, 1 pase defendido, 1 FF) y el veterano James Skalski (27 tackles, 0’5 sacks, 1 FR, 1 FTD). El rusher Myles Murphy (34 placajes, 3’5 capturas, 3 FF) será el encargado de amargar la noche a Book. En la secundaria, brillarán con luz propia los safeties Nolan Turner (44 tackles, 2 pases defendidos, 3 interceptaciones) y Joseph Charleston (34 placajes, 2 pases defendidos), así como el cornerback Andrew Booth Jr. (24 placajes, 1 sack, 4 pases defendidos, 2 interceptaciones, 1 FR, 1 FTD).
NOTRE DAME
A lo largo de toda su historia, Notre Dame ha sido un equipo independiente en el College Football, pero este año -debido a la pandemia- se han convertido en miembros de facto de la ACC y… pueden ganar su primer campeonato de conferencia. Pocos pronosticaban este hecho, pero el épico triunfo ante Clemson, tras dos prórrogas, deja claro que los de Brian Kelly son acreedores a una nueva victoria frente a los Tigers.
Una de las claves del espectacular año irish ha sido su defensa, hasta el punto que el Coordinador Defensivo Clark Lea ha obtenido el puesto como nuevo Head Coach de Vanderbilt. Lea permanecerá con Notre Dame este partido, pero no estará disponible a partir del próximo domingo, ya que asumirá la ardua misión de reconstruir el ruinoso programa de Nashville. Lea deberá trazar un plan específico para minimizar el daño ocasionado por Trevor Lawrence, mejorando la estrategia del primer enfrentamiento, pues D.J. Uiagalelei superó a la defensa irish con casi 440 yardas y 2 TDs. Notre Dame ocupa el puesto 41º de la nación contra el pase, el 8º contra la carrera y el 12º en puntos permitidos -solo concediendo 17’1 puntos por encuentro-. Las figuras de la zaga son el espectacular linebacker Jeremiah Owusu-Koramoah (48 placajes, 1’5 sacks, 3 pases defendidos, 1 interceptación, 3 FF, 2 FR, 1 FTD), el maravilloso y omnipresente safety Kyle Hamilton (46 tackles, 5 pases defendidos) y el trío de linieros defensivos Adetokunbo Ogunjedi (5’5 sacks), Isaiah Foskey (4’5 sacks) y Daelin Hayes (3 sacks).
Ian Book cuajó un impresionante partido ante Clemson, lanzando para 310 yardas, 1 TD y solo sufriendo 1 interceptación, sumando además 67 yardas de carrera. Su movilidad fuera del pocket y la adaptación de un playbook que le concede mucha más libertad nos ha permitido ver la mejor versión de Book. Completa el 63’3% de los pases que intenta, consiguiendo 2382 yardas, 15 TDs y solo recibiendo 2 interceptaciones. Mejora sus números con esa capacidad para correr, alcanzando 465 yardas y 8 anotaciones. Los mejores compañeros de Book por aire son los wide receivers Jason McKinley (660 yardas, 3 TDs) y Ben Skowronek (344 yardas, 5 TDs), y el impresionante ala cerrada freshman Michael Mayer (337 yardas, 2 TDs).
Mención aparte merece el colosal juego de carrera fighting irish, donde sobresale con luz propia Kyren Williams, responsable de 1011 yardas y 12 anotaciones. Williams está espectacularmente acompañado por Chris Tyree (459 yardas, 3 TDs) y C’Bo Flemister (303 yardas, 5 anotaciones). El número 11º de la nación parando a la carrera frente al equipo con el 11º juego de carrera más potente. Clemson ante Notre Dame. ¿Alguien da más?
CHAMPIONSHIP B1G
#14 NORTHWESTERN WILDCATS VS. #4 OHIO STATE BUCKEYES
#GoCats VS. #GoBuckeyes
19/12/20
18:00 / FOX
LUCAS OIL STADIUM, INDIANÁPOLIS (INDIANA)
El sábado, 19 de diciembre, a las 18 horas en España, se celebrará la final de la conferencia BIG10, en el Lucas Oil Stadium de Indiana (feudo de los Indianápolis Colts de la NFL). Se enfrentarán, finalmente, Ohio State y Northwestern, en una decisión muy controvertida, ya que, en el último momento, los organizadores de la BIG10 modificaron el reglamento establecido esta temporada por el tema COVID. Los magnates de la conferencia venían a decir que se tenía que jugar un mínimo de 6 partidos para poder optar a disputar la final de la conferencia. Los Buckeyes sólo habían logrado jugar 5, y por tanto, para que pudieran optar al Championship, era necesario modificar el reglamento inicial.
Todo es debido a intereses económicos, ya que, en este periodo de pandemia, todas las universidades y las propias conferencias han perdido muchos millones de dólares, y tomando la decisión de prohibir jugar la final de la BIG10 a Ohio State, esto repercutiría en más pérdidas económicas. Los Buckeyes están rankeados el #4 en el top 25, y por tanto optan a jugar los playoffs del nacional, con todo lo que conlleva. Si Ohio State no jugara la final de la BIG10, lo más probable es que descendería en el ranking del top 25, y, por tanto, no tendría opciones de jugar esos playoffs, con la pérdida de beneficios económicos que eso conlleva, no solo a la propia universidad, sino a toda la conferencia. Por tanto, se ha dejado jugar a Ohio State en detrimento de la Universidad de Indiana, que era la perjudicada en esta ocasión, aunque sin opciones de playoffs.
Después del revuelo pasamos a lo importante, el partido. Ohio State se presenta a este duelo invicto, ya que, aunque solo haya jugado 5 partidos, los ha ganado todos con solvencia, venciendo en uno de ellos a la propia Indiana, su perseguidora en la clasificación. Mientras, por el lado Oeste, Northwestern viene con un récord de 6-1, habiendo perdido tan solo frente a los Spartans de Michigan State.
Será un partido, que a priori, los chicos del HC buckeye Ryan Day, lo deberían de dominar desde su inicio -tal y como dicen los pronósticos de las casas de apuestas-, pero tendrán en frente un rival durísimo y rocoso, que no va a dar el partido por perdido en ningún momento, ADN de los equipos entrenados por Pat Fitzgerald.
NORTHWESTERN
El ataque de los Wildcats no es muy determinante, posicionándose tan solo como el #12 mejor ataque de la BIG10 en yardas generadas, con 351’4 yardas de media por partido (181 de pase y 170 de carrera). Además, puntúan una media de 25’3 puntos. Es un ataque que, aunque ha sido discreto, sí que ha mejorado muchísimo con respecto a otras temporadas, debido en gran medida a la llegada del QB Peyton Ramsey a través de un transfer desde la universidad de Indiana. Es un QB que no comete grandes estridencias, sin hacer grandes números (1218 yardas, 9 TDs y 6 interceptaciones), con un porcentaje de completos del 59%, pero que ha conseguido que su ataque no sea plano, no sea unidimensional, y en el que se ha equilibrado el juego tanto en la faceta terrestre como en la aérea.
Habrá que prestar atención al WR Chiaokhiao-Bowman (344 yardas y 4 TDs), y a su juego terrestre, en el que han estado rotando los RBs Anderson y Bowser, pero que, en el último partido, Fitzgerald le ha dado la alternativa al RB freshman Cam Porter, haciendo un magnífico partido frente a Illinois, y consiguiendo 142 yardas y 2 TDs. Tratarán de hacer ataques duraderos, tratando de quemar mucho reloj, ya que para ellos su mejor defensa empezará de este modo.
El peligro de Northwestern viene en la parte defensiva, un equipo que solo permite 14’6 puntos por partido al rival, en cuestión de yardas permitidas son 314 (192 aéreas y 122 terrestres). Tienen un equipo veterano, compenetrado y muy duro, jugando muy intenso y luchando cada yarda del campo. Un entramado defensivo complicado de superar, en el que el QB rival Justin Fields tendrá una dura prueba, que puede ser clave para escalar en el ranking del draft NFL. Jugadores importantes de esa defensa son el trío de LBs Gallager (61 tackles, 2 sacks, 1 FF, 1 FR y 1 interceptación), Fisher (62 tackles, 1 FF, 1 FR y 1 interceptación) y Bergin (58 tackles, 1 interceptación y 4 PD), junto al defensive back Brandon Joseph (38 tackles, 5 interceptaciones).
OHIO STATE
Aunque solo hayan jugado 5 partidos en la temporada, les ha bastado para demostrar que son uno de los mejores ataques de la nación. Los Buckeyes están comandados por uno de los candidatos al Heisman Trophy, el QB Justin Fields (1407 yardas, 15 TDs y 3 interceptaciones), que será observado con lupa por los ojeadores de la NFL. El ataque de los Buckeyes está promediando nada más y nada menos que 46’6 puntos y 532’4 yardas (281’4 aéreas y 251 terrestres). Conforman un equipo poderoso en todas sus líneas, partiendo por una OL top, con el RG Wyatt Davis y el LT Thayer Munford como destacados, y que otorgan el tiempo suficiente a Fields para jugar cómodo. Otros jugadores a tener en cuenta son los WRs Chris Olave (518 yardas y 5 TDs) y Garrett Wilson (572 yardas y 5 TDds), así como el RB estrella Master Teague III (426 yardas y 6 TDs). Un ataque que tendrá una prueba de fuego contra los Wildcats.
En el lado defensivo también tienen un equipo muy bueno, pero quizás no tan dominante como otros años. Es una defensa que permite 23’2 puntos por partido, además de 363’8 yardas (268’8 aéreas y tan solo 95 terrestres). Un dato a tener en cuenta son las yardas que permiten en el pase, por donde los de Northwestern deberían de aprovecharse. Parece que se perderán el partido el LB Tuf Borland y el DE Tyreke Smith, aunque destacarán otros jugadores como los LBs Pete Werner (32 tackle, 1 sack, 1 FF) y Browning (22 tackles, 1 FF, 1 FR y 2 pases defendidos), el DT Tommy Togiai (16 tackles, 3 sacks y 1 PD) y el CB estrella Shawn Wade (15 tackles, 2 interceptaciones, 1 TD y 3 pases defendidos).
En definitiva, será un partido duro e igualado en los primeros compases, y en el que, conforme pase el tiempo, el ataque de Ohio State deberá demostrar la calidad que atesora e irse imponiendo en el marcador poco a poco. No obstante, todo es una suposición sobre el papel, ya que Northwestern podría dar la campanada si consigue maniatar al ataque rival con su entramado defensivo. Si las huestes de Pat Firzgerald logran que Fields no juegue cómodo tendrán muchos puntos para decantar la balanza de su lado, además se tendrán que ayudar de un ataque que pueda estar mucho tiempo en el campo, ese es el otro objetivo a cumplir. De lo contrario, los Buckeyes les pueden pasar por encima como una apisonadora, ya que tienen que demostrar que son merecedores de entrar en los playoffs al nacional. Para Northwestern, sería la guinda del pastel a una gran temporada, y será el colofón final para varios jugadores muy importantes, ya que se despedirán de su etapa colegial para probar en la NFL.
CHAMPIONSHIP BIG XII
#10 OKLAHOMA SOONERS VS. #6 IOWA STATE CYCLONES
#BoomerSooner VS. #cyclONEnation
19/12/20
18:00 / ABC
AT&T STADIUM, ARLINGTON (TEXAS)
@CiclonesFB_ESP
UN POCO DE HISTORIA
23 de noviembre de 1912 Iowa, victoria de los Cyclones 23-3 contra los Bulldogs de Drake en el Drake Stadium, de Des Moines. 7 de diciembre de 2019, victoria de los Sooners 23-30 contra los Bears de Baylor en el AT&T Stadium, de Arlington, Texas.
39095 días separan el último partido que jugaron los equipos de football americano de Iowa State University y Oklahoma University para conseguir su último campeonato de conferencia.
El campeonato para los Cyclones de Iowa fue compartido con los Cornhuskers de Nebraska en la ya desaparecida Missouri Valley Conference. Ambos equipos consiguieron dos victorias y cero derrotas en partidos conferenciales lo que le permitió a ISU conseguir su segundo y último co-campeonato de conferencia.
Por su lado el equipo liderado por el Head Coach Lincoln Riley, logró su quinto campeonato consecutivo de la Big 12. Trece de los veintiséis campeonatos que se han disputado en esta conferencia han ido para la ciudad de Norman.
Baste esta somera introducción histórica para dejar claro que el partido del próximo sábado 19 de diciembre a las 18:00 horas, en el que se juega el campeonato de la BIG 12, representa dos universidades totalmente diferentes, un trasatlántico contra una barca de pescadores, un holding empresarial contra unos campesinos del maíz.
Pero en esta vida, tal y como dice Matt Campbell, Head Coach de los Cyclones de Iowa State “Lo que nos define son las acciones intencionales que tomamos en cada momento”. Por eso, se pueden escribir mil líneas con datos históricos, estadísticas de todo tipo, pero realmente lo importante, lo que todos estamos esperando, es lo que va a suceder cuando veintidós chavales salten al AT&T Stadium, de Arlington y se pongan a correr tras oír el silbato del cebra.
A pesar de lo dicho, vamos a intentar desgranar un poco el partido desde el punto de vista táctico y estadístico.
Estadísticamente hablando, nos encontramos con los dos mejores equipos, sin duda, de la Big 12 en este año de pandemia. Los Sooners han ganado sus 6 últimos partidos después de la derrota precisamente en el Jack Trice Stadium por 30-37, anotando 278 puntos a favor y recibiendo 123 en contra. Este aspecto implica un margen de victoria por partido de 25’83 puntos, anotando 46’33, lo que, sin lugar a dudas, sitúa a Oklahoma -junto con Alabama- como el equipo más en forma de la nación. Mientras los Cyclones también vienen de una racha ganadora de cinco partidos consecutivos con 200 puntos a favor y solo 79 en contra, es decir, han conseguido las victorias recibiendo solo 15’8 puntos por partido, con un margen muy parecido al de su rival el sábado -de 24 puntos-, lo que hace a Iowa State acreedor a ser el primer equipo en la fase regular de la BIG 12.
OKLAHOMA DEFENSE Vs. IOWA STATE OFFENSE
Desde el punto de vista del ataque de ISU y la defensa de los Sooners, hay que destacar al RB sophomore Breece Hal que lidera en todas las estadísticas posibles a los RBs de la conferencia y que, además, es el primero en yardas totales con 1357, segundo en yardas terrestres por partidos, primero en partidos con más de 100 yardas, siendo el jugador que más yardas consigue tras contacto y segundo en conseguir tackles fallados por la defensa rival.
Será él y el juego de la línea ofensiva -nominada entre las 11 mejores del College Football al Joe Moore Award-, donde, sin lugar a dudas, se decidirá si el ataque planteado por el Coordinador Ofensivo Tom Manning puede ganar a la defensa nº 4 del país contra la carrera. Los Sooners solo permiten 88’1 yardas terrestres por partido, mientras que los Cyclones consiguen una media de 199’9 yardas por partido.
La línea ofensiva de ISU solo ha permitido 10 sacks esta temporada, la menor cantidad en la Big 12, noveno a nivel nacional. Por su parte, los Sooners son el sexto mejor equipo defensivo en sacks al realizar 33 capturas. En este aspecto, destaca sobre manera el junior Isaiah Thomas con 8 sacks y Ronnie Perkins que solo ha disputado los cuatro últimos partidos de la temporada por una sanción y ha conseguido 11 tackles solo, 6 asistidos y 4 sacks, evidenciando una mejoría increíble en el juego defensivo diseñado por el Coordinador Defensivo Alex Grinch.
En cuanto al juego aéreo de Iowa State y las tropas antiaéreas de Oklahoma, hemos de destacar que estas permiten 234’2 yardas, que son prácticamente las mismas que consigue Brock Purdy con 241’8 yardas por partido. El rendimiento del QB Cyclone ha ido de menos a más con el transcurso de la temporada, llegando a su punto más bajo en el partido del 8 de noviembre contra Baylor, donde sufrió 3 interceptaciones en la primera parte. Desde ese momento Purdy ha jugado 12 cuartos consiguiendo 10 TDs, ninguna interceptación y dando una sensación absoluta de dominio de los partidos.
También ha recibido más libertad para ejecutar jugadas de carrera para así no aguantar tanto en el pocket. El miedo que generan los play action y options con Hall ha hecho que el juego aéreo mejore, basándose, sobre todo, en un gran cuerpo de TEs, liderados por Charlie Kolar (5 TDs, 466 yardas) y el WR Hutchinson (50 recepciones, 612 yardas y 4 TDs).
Si hay una defensa que les pueda parar esa es la de los Sooners, que ha conseguido 10 interceptaciones, pero que se basa principalmente en su línea defensiva para crear el caos en el equipo rival. Los defensive backs sooners -aunque son un cuerpo joven- están jugando a un buen nivel, destacando los defensive backs Tre Norwood -con 3 interceptaciones- y Tre Brown -con 2-. Otro tema que hay que poner de relieve a este lado del ovoide, es uno al que no se le suele hacer mucho caso y es la diferencia de altura entre los receptores cyclones y la defensa de Oklahoma.
IOWA STATE DEFENSE VS. OKLAHOMA OFFENSE
El hombre que susurraba a los QBs. Esa puede ser la definición del genial Lincoln Riley. En los últimos tres años, dos de sus QBs, Mayfield y Murray, fueron elegidos números uno de sus correspondientes drafts y Hurst fue elegido en segunda ronda en el draft del 2020 y ya es el QB titular de los Eagles de Philadelphia. En esta ocasión, llega al mando de los Sooners, el freshman Spencer Rattler que ha registrado unos números fantásticos, 24 TDs, 7 interceptaciones, 2512 yardas por aire y 4 TDs de carrera. Su juego y su forma de ser genera diversidad de opiniones, pero con el paso de los partidos las críticas se han ido reduciendo. Su mejor socio en el ataque aéreo es el freshman Marvin Mims -con 7 TDs en tan solo 29 recepciones y 482 yardas-. Le acompaña el WR sophomore Theo Wase y el TE Austin Stogner ,con 3 TDs cada uno.
La secundaria de los Cyclones está liderada por el senior y capitán del equipo Greg Eisworth -con 41 tackles– y el increíble freshman Isheem Young -con 2 fumbles forzados y una interceptación, que consiguió precisamente contra Rattler y que evitó la remontada en el partido disputado en Ames-. El CB Anthony Johnson Jr. tendrá la difícil tarea de parar a Mims.
La línea de Oklahoma -que ha permitido 21 sacks- tiene un importante trabajo en evitar que la presión a su QB provoque errores de novato que puedan tirar por tierra el partido. Contra ellos, luchará una línea defensiva liderada por Will McDonald IV -con 8,5 sacks, lo que le coloca como el jugador de la BIG 12 con más sacks y sexto de la nación- y el senior Jaquan Bailey -con 7 sacks-.
En el ataque terrestre de los Sooners, destacamos al renacido Rhamondre Stevenson que, en solo cuatro partidos, ha conseguido la friolera de 6 TDs, 382 yardas de carrera y 175 de recepción.
En general, el ataque de Oklahoma asusta, séptimos con 43,4 puntos por partido, octavos en pase por partido con 327,1 yardas y decimoquintos en yardas totales por partido. En frente, una defensa liderada por el LB Mike Rose (81 tackles, 10 TFL, 4 interceptaciones) y su Coordinador Defensivo Jon Heacock, que plantea una defensa 3-3-5 que se dobla pero no se rompe, lo que se corrobora cuando compruebas que es la décima mejor defensa en la red zone, sufriendo 29 ataques pero solo permitiendo 19 TDs y 2 FGs. Eso sí, en esta ocasión, se enfrentan al duodécimo mejor ataque en la red zone con 51 visitas y únicamente en cuatro de ellas no han conseguido subir puntos al marcador, teniendo un 92.2% de éxito anotador con 35 TDs y 12 FGs.
CHAMPIONSHIP AAC
#23 TULSA GOLDEN HURRICANE AT #9 CINCINNATI
#ReignCane VS. #CinCityPride
20/12/20
02:00 / ABC
NIPPERT STADIUM, CINCINNATI (OHIO)
El sábado 19 de diciembre en el Nippert Stadium de Cincinnati, se juega la final de la American Athletic Conference, el Huracán dorado de Tulsa, que tiene un récord de 6-1 (6-0 en la conferencia) visitan a unos Bearcats de Cincinnati imbatidos, que van 8-0 en su cómputo de victorias y derrotas. Se enfrentarán dos equipos correosos, con muy buenas defensas.
Cincinnati viene como el #9 del Top 25 de la nación, invicto al partido con un 8-0 y demostrando ser el equipo que se esperaba esta temporada, ya que era uno de los favoritos para ganar la conferencia. No obstante, n la final no lo tendrá nada fácil, ya que se verá las caras con Tulsa que están jugando a un nivel defensivo descomunal gracias a su gran estrella el LB Zaven Collins. Aunque las apuestas dan como gran favorito a los de Cincinnati, con un 79,9%, se espera un partido muy físico, defensivo, y bastante igualado. Se enfrentan dos defensas titánicas, muy difíciles de batir y en la que la clave del partido estará en cómo responden esos ataques. Es un partido que por motivos de COVID no se ha podido disputar en temporada regular, en la primera fecha se pospuso y en el segundo intento se canceló definitivamente, así que será el partido que deseábamos ver desde hace semanas.
TULSA
Tulsa en ataque promedia 27’7 puntos por partido, consiguiendo 411’1 yardas (251’7 aéreas y 159’4 terrestres), sus RBs no convencen y no generan peligro en la end zone, -tan solo han conseguido 8 TDs entre los tres RBs del comité-. El mayor peligro lo genera en el apartado aéreo, aunque su QB Zach Smith no está cuajando una buena temporada (1435 yardas, 11 TDs y 6 interceptaciones), tan solo ha conseguido un 57,8% de pases completados. Destacamos el cuerpo de WRs, con jugadores de la talla de Josh Johnson (484 yardas, 6 TDs), Keylon Stokes (508 yardas y 2 TDs) y JuanCarlos Santana (378 yardas y 3 TDs).
En defensa, Tulsa permite 19’9 puntos por partido, y 329’4 yardas (184’1 aéreas y 145’3 terrestres). Sobresale el LB estrella Zaven Collins (52 tackles, 4 sacks, 2 TDs, 4 interceptaciones, 2 FF, 1 FR y 2 pases defendidos), que ha realizado una magnífica temporada. Espectacular jugador que ha sido el mariscal de esa defensiva, omnipresente en todas las jugadas y contagiando su esfuerzo hacia sus compañeros, un auténtico líder, aspecto que seguramente le catapultará en el próximo Draft de la NFL, subiendo su valor hasta las dos primeras rondas.
Otros jugadores que debemos destacar son su compañero en el cuerpo de LBs Justin Wright (51 tackles, 1’5 sacks y 1 interceptación), el S Kedarian Ray (51 tackles y 5 pases defendidos), el DT Jaxon Player (28 tackles y 3 sacks), el DE Anthony Goodlow (27 tackles, 3 sacks, 1 FF y 1pase defendido) y el CB Nickel, Cristian Williams (31 tackles y 2 pases defendidos). La defensa de Tulsa es muy buena parando la carrera, por lo que una de las claves será obligar a Ridder a pasar y cerrarle las salidas en carrera en jugadas rotas.
Será un partido en el que Cincinnati va a tener que luchar mucho para conseguir ganar,, encuentro de mucha estrategia desde la banda, por parte de Luke Fickell y Phillip Montgomery. Va a ser una interesantísima final de conferencia entre dos equipos que han jugado una gran temporada.
CINCINNATI
Cincinnati ataca con un juego de carrera muy fuerte y con la utilización en el juego aéreo tanto de su RB como de su TE. Consiguen anotar 40’9 puntos por partido, además de 473’1 yardas (238’9 aéreas y 234’3 terrestres). Cuentan con la movilidad de su QB Desmond Ridder, que está siendo decisivo, sobre todo en carrera, lleva 1821 yardas de pase, 16 TDs y 6 interceptaciones, mientras que por tierra acumula 526 yardas y 11 TDs. Otros jugadores sobresalientes en ese ataque son la dupla de RBs, en la que la mayor parte de los snaps son para Gerrid Doaks -consiguiendo hasta el momento 660 yardas terrestres, 7 TDs y 202 yardas aéreas y 2 TDs-, y el otro RB Jerome Ford (329 yardas terrestres y 6 TDs). Junto a ellos, vale la pena mencionar al TE Josh While, con 291 yardas y 5 TDs.
Cincinnati en defensa, permite tan solo 15 puntos de media al rival, y 308’1 yardas (195’6 aéreas y 112’5 terrestres). Destacan los LBs Jarel White (68 tackles, 2 sacks, 1 TD, 1 interceptación y 2 pases defendidos) y Darrian Beavers (48 tackles, 1’5 sacks, 1 interceptación y 1 pase defendido), los CBs Ahmad Gradner y Coby Bryant, ambos con tres interceptaciones, el DE Myjai Sanders (27 tackles, 5 sacks, 2 pases defendidos), y la pareja de S James Wiggins (31 tackles, 1 sack, 1 FF, 1 interceptación y 6 pases defendidos) y Darrik Forrest, que, aunque empezó la temporada bastante discreto, sí que ha mejorado mucho y ya es el defensa que se esperaba (24 tackles, 2 interceptaciones y 1 pase defendido). Por tanto, hablamos de una defensiva muy bien armada en todas sus líneas, que será muy difícil de superar por parte de los de Tulsa.
CHAMPIONSHIP SUN BELT
#19 LOUISIANA RAGIN’ CAJUNS AT #12 COASTAL CAROLINA CHANTICLEERS
#GeauxCajuns VS. #BEL1EVE
19/12/20
21:30 / ESPN
BROOKS STADIUM, CONWAY (SOUTH CAROLINA)
ENCUENTRO CANCELADO
El momento más álgido del año ha llegado para Louisiana y Coastal Carolina. Ambos equipos se verán las caras en el tapete verde esmeralda del Brooks Stadium para dilucidar quién es el mejor conjunto de la Sun Belt. Todo apunta a que los Ragin’ Cajuns perderán, por tercera vez consecutiva, el Championship, pues las dos anteriores mordieron el polvo ante Appalachian State. Esta vez el rival cambia, pero estos Chanticleers se presentan como el número #12 de la nación y con un espectacular récord de 11-0. El partido supondrá una nueva reedición del encuentro que ya se disputó el pasado 15 de octubre en el Cajun Field y que se llevaron las huestes de Jamie Chadwell por un marcador de 30-27.
LOUISIANA
Las mesnadas aleccionadas por Billy Napier buscarán venganza ante el único equipo que consiguió robarles una victoria en esta magnífica campaña. Los Ragin’ Cajuns (9-1) han ofrecido una de sus mejores versiones de los últimos años, consiguiendo victorias de gran prestigio ante rivales de entidad como Iowa State o Appalachian State -su auténtica bestia negra-. La clave de la anterior derrota ante los Chanticleers fue la ineficacia del juego de pase, pues Louisiana solo alcanzó 177 yardas en el envite. Napier sabrá ajustar y buscar las debilidades del formidable Black Swarm para intentar mejorar este aspecto ofensivo. Sin embargo, el arma más mortífera de los Ragin’ Cajuns es su juego terrestre, que los ha catapultado en el puesto 25º de la nación, con una espectacular media de 207’8 yardas por partido. Elijah Mitchell se ha consolidado como el líder de ese backfield, consiguiendo 751 yardas y 7 anotaciones. Su alter ego lo encarna Trey Ragas, que también ha cuajado una temporada espectacular con 660 yardas y 9 anotaciones. El perfecto equilibrio entre juego aéreo y terrestre será la clave para tumbar, de una vez, a estos aguerridos gallos de pelea.
El hombre que mueve toda la ofensiva de Louisiana es el mariscal de campo Levi Lewis, una auténtica amenaza por aire y tierra. El quarterback nacido en Baton Rouge ha logrado 2128 yardas de pase y 17 TDs, pero ha arriesgado demasiado el ovoide y ha sufrido 7 interceptaciones. Su condición de dual threat es palpable con sus 310 yardas por tierra y 5 anotaciones. La parcela aérea está muy bien repartida entre un póker productivo de jugadores, entre los que destaca la labor de Jalen Williams (345 yardas, 3 TDs), Peter LeBlanc (334 yardas, 1 TD), Karen Lacy (326 yardas, 3 TDs) o Dontae Fleming (190 yardas 1 TD).
En la parcela defensiva todos los focos se centran en dos magníficos linebackers, Lorenzo McCaskill (72 placajes, 2 sacks, 1 FF, 1 FR) y Ferrod Gardner (66 tackles, 3’5 capturas). Otros jugadores a seguir son el defensive line Zi’Yon Hill (42 tackles, 4 sacks, 2 FR) y la pareja de safeties Bralen Trahan y Percy Butler.
COASTAL CAROLINA
Los Chanticleers han vivido una temporada histórica de la mano de la gran gestión del magnífico head coach Jamey Chadwell -que se ha ganado una renovación de contrato de 7 años-. Se han convertido en el programa de la Sun Belt “rankeado” más alto y en el único equipo, dentro de la conferencia, en obtener un espectacular 11-0. La undécima victoria resultó harto compleja, pues los Chanticleers tuvieron que remontar in extremis un partido que se les complicó ante Troy.
El quarterback freshman Grayson McCall sigue deslumbrando esta temporada, manejando cada vez mejor las cadenas del ataque. Completa el 69’3% de sus pases intentados, alcanzando ya las 2170 yardas y 23 TDs, y solo recibiendo 2 interceptaciones. Su movilidad es otra de sus fortalezas, pues ha corrido 96 veces para 473 yardas y 6 anotaciones. Su gran socio es el wide receiver Jaivon Heiligh, que está realizando una campaña sensacional (820 yardas, 10 TDs). Junto a Heiligh, el ataque aéreo de Coastal Carolina cuenta con armas muy importantes como el tight end Isaiah Likely (517 yardas, 4 TDs) o los WRs Sam Denmark y Kameron Brown.
El running back estrella C.J. Marable está deslumbrando a propios y a extraños con una temporada pluscuamperfecta. Ya acumula 844 yardas y 12 TDs, añadiendo, además, 220 yardas aéreas y 7 TDs. Se complementa a la perfección con sus dos compañeros de backfield, el sophomore Reese White (468 yardas, 6 TDs) y Shermari Jones (377 yardas, 3 TDs). Marable y compañía están asolando, hasta el momento, los emparrillados sin que nadie pueda pararlos. Sin duda, la consolidación y dominio del juego de carrera chanticleer será la clave del partido para el conjunto de Chadwell.
La unidad comandada por el Coordinador Defensivo, Chad Staggs, ha sido bautizada con el apelativo “Black Swarm” (Enjambre Negro), pues el poderío de la defensa reside en la fuerza colectiva, en su actuación como un auténtico enjambre mortífero. El cuerpo de linebackers es impresionante, con jugadores que están rindiendo a un nivel descomunal: Silas Kelly (72 placajes, 4’5 sacks, 1 interceptación, 1 FR), Teddy Gallagher (71 tackles, 0’5 capturas, 1 FF, 1 FR), Enock Makonzo (66 tackles, 2 sacks, 2 FF, 1 FR) y Jeffrey Gunter (50 placajes, 6’5 capturas, 1 interceptación, 5 FF). La presión al quarterback tiene dos nombres: Tarron Jackson (49 tackles, 8’5 sacks, 3 FF, 1 FR) y C.J. Brewer (57 placajes, 6’5 sacks, 1 FF, 1 FR).
CHAMPIONSHIP MOUNTAIN WEST
BOISE STATE BRONCOS VS. #24 SAN JOSÉ STATE SPARTANS
#BleedBlue VS. #SpartanUp
19/12/20
22:15 / FOX
SAM BOYD STADIUM, LAS VEGAS (NEVADA)
San José State consiguió su clasificación para el partido más importante de la Mountain West, tras una gran remontada ante una combativa Nevada. Las huestes aleccionadas por Brent Brennan comenzaron el encuentro con muchos nervios y demasiado timoratos en la primera parte, permitiendo un dominio 20-7 del Wolfpack. Un tercer cuarto impresionante -en defensa y ataque-, unido a los continuos tiros al pie de Carson Strong y los suyos otorgó el billete para el Championship, aspecto que, indirectamente, también le daba un puesto en la final a Boise State.
Por su parte, los Broncos, tras una irregular campaña, se mantienen invictos en la conferencia gracias a su triunfo sobre Wyoming, en un reñido y competido encuentro bajo la nieve.
Este decisivo duelo en la cima de la Mountain West debiera haberse disputado previamente hace unas semanas, pero Boise State no pudo presentar los efectivos necesarios al encuentro debido a las vicisitudes propias de la COVID-19. El encuentro finalmente se disputará en el Sam Boyd Stadium de Las Vegas, hogar provisional de los Spartans tras la negativa del Condado de Santa Clara de albergar eventos deportivos durante la pandemia. Se barajó el Allegiant Stadium, pero Las Vegas Raiders disputará el Thursday Night esta semana y se hace inviable celebrar allí el Championship.
BOISE STATE
Los Broncos quieren continuar su dominio aplastante sobre San José State y anotarse la victoria consecutiva número quince desde que ambos programas se vieron las caras, por primera vez, en 1978. El conjunto de Brysan Harsin parece recuperado de ese profundo bache que supuso la debacle ante BYU. La total disposición de su quarterback titular, Hank Bachmeier, y, sobre todo, la recuperación de su corredor estrella, George Holani, aumenta las posibilidades de Boise State y le hace partir como claro favorito en este duelo ante la sorprendente San José State.
Hank Bachmeier (929 yardas, 6 touchdowns, 2 interceptaciones, 1 anotación) tiene mal recuerdo de San José State, ya que, el pasado año, una lesión de hombro en la victoria de Boise State en la ciudad californiana, supuso el fin de su temporada. Los problemas físicos han lastrado la carrera de uno de los quarterbacks más prometedores en su año freshman. Esta temporada ya se perdió los partidos ante Air Force y BYU. Un Bachmeier sano será la mejor noticia para Boise State y… para la evolución del propio Hank.
La excelencia en el juego de carrera es una de las idiosincrasias más definitorias del programa de Idaho. Sin embargo, este sistema ofensivo preponderantemente terrestre no está funcionando del todo este año. La baja por lesión de su running back estrella, George Holani (108 yardas, 1 TD) ha sido clave en la merma terrestre del otrora poderoso backfield bronco. Su participación en el encuentro será, sin duda, la mayor baza del conjunto entrenado por Bryan Harsin. Andrew Van Buren, a pesar de su efectividad en red zone (8 TDs), lleva una patética media de 3’6 yardas por acarreo, acumulando unas escasas 356 yardas. Por tanto, la vuelta de Holani se antoja decisiva en este duelo a muerte frente a la agresiva defensa contra la carrera espartana.
Khalil Shakir es, sin duda, el principal estilete por aire, acumulando 634 yardas y 6 touchdowns. Pero no solo aporta por aire, pues Shakir también ha contribuido con 152 yardas terrestres. C.T. Thomas (322 yardas, 2 TDs) complementa perfectamente a Shakir. Junto a los receptores, la pareja de tight ends formada por John Bates y Riley Smith componen un nutrido e interesante cuerpo aéreo. Mención aparte merece Avery Williams, uno de los mejores retornadores del país, que ya acumula dos retornos para touchdown. Además, está en el top 10 nacional en promedio de yardas por retorno de kick offs y punts.
Uno de los grandes problemas de Boise State viene de la parcela defensiva, que no está rindiendo al nivel del pasado ejercicio. Ante el imponente juego por aire de San José State, la necesidad de mejorar la agresividad defensiva y minimizar los puntos encajados debe ser una cuestión perentoria. Un duelo de pistoleros entre Starkel y Bachmeier puede significar una auténtica ruleta rusa, que -quizá- caiga del lado espartano. Por tanto, la vuelta a los cánones más ortodoxos, a esa pretérita seguridad defensiva, tiene que ser obligada para Harsin y Jeff Schmedding, el Coordinador Defensivo. Los nombres más sobresalientes de la defensa de los Broncos son los del linebacker Riley Whimpey (54 tackles –24 solo-, 1 sack, 1 pase defendido), los defensive lines Shane Irwin (28 placajes, 6 sacks), Sam Whitney (21 placajes, 2 sacks, 1 pase defendido) y Scott Matlock (22 tackles, 2 capturas), así como los defensive backs Jalen Walker y Kekaula Kaniho.
SAN JOSÉ STATE
Los Espartanos han realizado una campaña simplemente sensacional, que tuvo como colofón la remontada del pasado viernes y la consecución del billete para el Championship de la Mountain West. La clave del partido ante Nevada fue aprovechar ese momentum en el tercer cuarto y aprovechar de los innumerables errores del Wolfpack.
Brent Brennan, head coach de los Spartans, aún recuerda la dolorosa derrota del pasado año. Una San José State liderada por un espectacular Josh Love se iba al descanso con un marcador favorable de 17-7. Pero, en la reanudación, unos Broncos comandados, por un excelso Hank Bachmeier, remontaron el encuentro para terminar ganando 52-42. Brennan considera que el equipo está mucho más preparado que el pasado ejercicio y piensa que las estadísticas están para romperse, pues Boise State domina la serie por un contundente 14-0. Ahora bien, estos Espartanos no son la “cenicienta” de antaño, han conseguido uno de los mejores temporadas del programa y venderán cara su derrota -histórica- número 15 ante el equipo de Harsin.
Desde el punto de vista ofensivo, San José State está liderado por el espectacular quarterback Nick Starkel (1453 yardas de pase, 13 TDs, 66’3% de efectividad, 4 interceptaciones), que está realizando una temporada de ensueño. Nick llegó a los Spartans como graduate transfer, tras su periplo en la SEC en los programas de Texas A&M y Arkansas. Starkel es un pasador muy prolífico, convirtiéndose en el mariscal de campo más preciso de la conferencia, solo por detrás de Carson Strong -QB de Nevada-. En esta ofensiva urdida por Hennan, Starkel comparte snaps con el otro QB, el sophomore Nick Nash, que es un arma mortífera por tierra (197 yardas, 1 anotación).
Junto a este QB dual threat llamado Nash, los acarreos en San José State se reparten entre Tyler Nevens (454 yardas, 5 TDs) y Kairee Robinson (246 yardas, 2 anotaciones). No obstante, sin ninguna duda, la base del sistema ofensivo espartano es el juego aéreo. El gran objetivo de ambos QBs es el receptor senior Bailey Gaither -uno de los wide receivers más prolíficos de la Mountain West- que acumula 627 yardas y 4 touchdowns. Otros referentes en este importante sistema aéreo son el tight end Derrick Deese Jr. (163 yardas, 4 TDs) y los receptores Tre Walker (409 yardas, 3 TDs) e Isaiah Hamilton (125 yardas, 1 TD).
Desde el punto de vista defensivo, SJSU solo ha permitido más de 20 puntos en dos partidos (victorias sobre Lobos y Rainbow Warriors), situando a los Espartanos con un extraordinario promedio de apenas 17’5 puntos concedidos por encuentro. Espectaculares números logrados por la unidad defensiva entrenada por Derrick Odum. El indiscutible líder de la zaga es el linebacker junior Kyle Harmon, que acumula 67 placajes -26 solo-, 0’5 capturas y 2 pases defendidos. Junto a Harmon, los linieros defensivos Viliami Fehoko (5 sacks) y Cade Hall (8 sacks) aportan capacidad para presionar al quarterback rival. Mientras que los safeties Tre Webb y Tre Jenkins son los hombres más importantes de la secundaria.
COMMANDER IN CHIEF’S TROPHY
AIR FORCE FALCONS AT ARMY BLACK KNIGHTS
#LetsFly VS. #GoArmy
19/12/20
21:00 / CBSSN
MICHIE STADIUM, WEST POINT (NEW YORK)
ALBERTO HERRERO, COMMANDER FOOTBALL ESP – @NAVY_ESP
Este partido se debía haber disputado el 7 de noviembre, pero a consecuencia de incidencias con la Covid-19, se aplazó a este sábado, y se disputará por primera vez en la historia tras el Army Vs. Navy de la semana pasada.
El Commander In Chief´s Trophy estará en juego en West Point tras sendas victorias frente a Navy de ambas academias (Air Force 40-7 y Army 15-0). Los Falcons buscan su cuarta victoria de la temporada y lograr así un récord global de 4-2, que puede que les catapulte a una bowl. Army, con su presencia garantizada en la Radiance Technologies Independence Bowl, tratará de seguir sumando una W en su casillero, que ya cuenta con un destacado 8-2. Los Falcons, han tenido más tiempo para preparar su asalto al CIC Trophy, pero Army viene con la moral por las nubes tras ganar el Army-Navy, el partido más importante del año, para ellos. Si Air Force vence, confirmará su poderío en esta competición y lograría su 21º título, los Black Knights por su parte conseguirían su 8º campeonato.
En el histórico de enfrentamientos, se han enfrentado en 54 ocasiones con 37 victorias para Air Force, 16 para Army y 1 empate entre ambos. El año pasado, en el Falcon Stadium, los locales vencieron por 17-13.
AIR FORCE
El quarterback de Air Force, Haaziq Daniels, se ha adueñado de la posición, donde ha demostrado que maneja perfectamente a su ofensiva. Ha lanzado 326 yardas de pase en 24/40, ha corrido 236 yardas y ha anotado 2 touchdowns. La línea ofensiva es una de las mejores del College. Destacan Nolan Laufenberg y Parker Ferguson, ambos nombrados en el equipo ideal de la Mountain West. Tras esta poderosa línea puede brillar casi cualquier jugador. Aparte de las carreras del propio Daniels, el comité de running backs está deslumbrando por su calidad con jugadores como Remsberg, Jackson y Roberts, los cuales han tenido destacadísimas actuaciones. Las principales amenazas aéreas serán su tight end Kyle Patterson y su receptor Brandon Lewis.
En defensa, su mejor hombre está siendo Elisah Palm, cornerback, con 30 tackles, 3 pases defendidos y 1 interceptación. El defensive tackle George Silvanic también está haciendo buena temporada con 23 tackles, 4 para pérdida de yardas y 2’5 sacks. Otro hombre a seguir será Corvan Taylor, defensive back, 21 tackles, 2 interceptaciones y 1 pase defendido.
ARMY
Al igual que en Air Force, un quarterback joven, Tyhier Tyler, ha sido el jugador que se ha asentado en la posición. Con solo 5 partidos como titular, tiene 440 yardas de carrera, 2 touchdowns por tierra anotados y solo ha lanzado 2/3 en pases para 53 yardas. Los Black Knights confiarán en las carreras de Jacobi Buchanan (388 yardas, 5 touchdowns) y el buen hacer en red zone de su capitán Sandon McCoy (236 yardas y 10 touchdowns anotados). Su jugador más sorprendente está siendo el slotback Tyrell Robinson. Sin duda, el freshman del año en Army, que además es la principal amenaza aérea con 117 yardas de pase en 5 recepciones y 2 touchdowns anotados. También ha corrido 392 yardas en 55 intentos y le hemos visto grandes retornos de patada en los equipos especiales.
En el apartado defensivo, en esta unidad élite, brillan varios nombres propios. Los linebackers Jon Rhattigan (71 tackles, 9 para pérdida de yardas, 1’5 sacks) y Arik Smith (66 tackles, 3’5 sacks) son sus principales estandartes. En la secundaria cuentan con 2 playmakers como son los defensive backs Cedrick Cunningham (59 tackles, 2 sacks, 1 interceptación) y Marquel Broughton (58 tackles, 3 pases defendidos, 2 interceptaciones, 1 FF y 1 FR).
Army y Air Force ya se conocen muy bien, tanto a nivel de nombres como de esquema, lo que limita las ventajas de cada ofensiva cuando los dos se enfrentan en cada temporada. Se prevé un partido cerrado, en el que dominarán las defensas y con anotación baja. Como cualquier clásico entre las academias militares, la carrera y la triple option serán las protagonistas ofensivamente hablando, y la concentración de las defensas deberá de ser máxima, para cortar los pocos intentos de pase que se produzcan, ya que al ser “jugadas sorpresa” pueden ser clave y terminar en big plays.
Los equipos especiales serán también muy importantes. Army de la mano de su coordinador Sean Saturnio, ya hemos visto de lo que son capaces, realizando muchas jugadas de mérito. Ambos equipos tienen kickers muy sólidos: Schuettpelz-Rhol, en los Falcons y Maretzki, en los Black Knights. Los de West Point han hallado un diamante en Zack Harding, que en el último partido frente a Navy, en 7 punts, colocó 5 dentro de las 20 yardas de los Midshipmen.
CURIOSIDADES
A pesar de ser un encuentro a puerta cerrada para el público en general, habrá colorido en las gradas, ya que los cadetes podrán asistir al mismo, debido a los fuertes controles de salud a los que son sometidos en la academia.
Los 2 equipos lucirán sus uniformes especiales de rivalidad que ya lucieron contra Navy. El de Air Force, en honor a los Tuskgee Airmen y el de Army, honrando a la Tropic Lightning Division.
Como la semana anterior, el objetivo de ambos es, al finalizar el encuentro, ser el último que entone la canción de su Alma Mater, lo que significará la consecución del Commander in Chief’s Trophy.
¡SING SECOND!
#CoollegeNation #BeTheCoolest